Chica mala

30.11.2013

Disculpad este lapso de silencio en el blog... entre las vacaciones y la vuelta al trabajo en las semanas previas a navidades con jornadas laborales exhaustivas, apenas he tenido tiempo para sentarme a escribir unas líneas.

Lo bueno es que siempre que me veo obligada a hacer pausas, regreso con ganas renovadas. Esta semana apenas he podido atender el tlf de Marina ya que estaba en la oficina hasta muy tarde, notaba como el estrés iba haciendo mella, no puedo evitarlo, el estrés me excita muchísimo, vienen ami mente imágenes y frases soeces con las que me recreo... Y cuando finalmente pude concertar una cita esta semana, alcanzó un nivel apoteósico. Tuve que morderme la lengua durante la llamada para no decirle las ganas que tenía de una buena sesión de sexo, y concretamente, como fue el caso, se convirtieron prácticamente en dos horas dedicadas a mí y a vaciar por completo mi botella de champán. Lo recuerdo y me excito de nuevo...

En estos días previos en los que no tenía tiempo de cerrar citas, pero andaba estresada y con ganas de sexo, he recurrido mucho al porno disponible por internet, ya sabéis, un ratito antes de dormir..

Desde hace unos meses fantaseo con una práctica en concreto, y que dudo seriamente llegue a hacer alguna vez, pero me vuelvo loca contemplándolo. Es duro, muy duro.. pero me pone. Hablo de... una triple penetración. O incluso una cuadruple, con dos penes en el ano o vagina de ella (normalmente suele verse en el ano), la tercera en la vagina, y la cuarta en la boca.

Es animal a más no poder. Una mujer penetrada por todos los orificios de su cuerpo. Pienso en lo que debe sentir y se me pone la carne de gallina. Ellos la vapulean y cambian de postura constantemente como si fuera una muñeca. Ella no es ella, no es ninguna actriz porno de nombre y apellido en el sector, ni la amiga, ni la novia, ni la vecina, que más da. En ese momento sólo es un ente con 3 agujeros, a cual más dilatado, más lubricado, más hambriento. Me hago una ligera idea de lo que debe sentir, tan fuera de sí que la respuesta natural sería que el cerebro entrase en fase de Servicios Mínimos imposible como debe ser procesar a la par las sensaciones recabadas desde la vagina, ano, boca , lengua y la saliva, inclusive de unas manos que pellizacan los pezones. Creo que yo entraría en un fallo multiorgásmico sin posibilidad de reanimación...

Es sólo una fantasía, no creo que lo ponga en práctica nunca, y dudo muchisimo que lo llegase a hacer en mi faceta como escort. Pero me acelera y me hace sentir un animal primario, la hembra que sólo ansía que la cubran cuantos más machos posibles.

Me excita tanto ver estos videos, que, una vez terminado, duermo como una bendita.

O sencillamente, como una chica mala que acaba de tener un delicioso orgasmo...

Marina

Blog de Marina Costa. Escort en Madrid